Gran parte de los padecimientos psíquicos tienen su origen en la infancia, en la forma en que se estructuró la personalidad del individuo y en los vínculos primeros que estableció (entiéndase relaciones familiares, con los padres, los hermanos o las personas que cumplieron esa función).

Por esta razón, además de una herramienta de maduración personal la terapia individual psicoanalítica es un proceso de introspección, que busca el cambio y la evolución de la persona, a través de una reflexión profunda sobre sus pensamientos, deseos y anhelos más profundos. La terapia individual psicoanalítica, es un proceso gradual, que ayuda a fortalecer y establecer de manera solida la personalidad.